No Estamos Solos

Luego de estar tanto tiempo con la misma rutina y hacer uso de sus mejores estrategias para estafar hombres y conseguir dinero para drogas, Ámbar conoció por accidente a Sebastián Anderson, un hombre que la defendió en un bar. Ella logró seducirlo esa misma noche solo para amanecer juntos y después enterarse que se trataba de su nuevo profesor de literatura. Sebastián entiende que no puede llegar a sentir nada por Ámbar, pero le es imposible encontrar un balance entre su vida personal y su vida privada. Él intenta negar los sentimientos que tiene hacia ella, pero ya es tarde para...

Sin tener la intención de buscar el amor, Alison lo logra encontrar con el doctor Smith. Desde el momento en que lo vio no pudo dejar de pensar en él y en las sensaciones que este causaba en ella. Jeremy, al ser 8 años mayor, hará preguntarse a Alison sobre si lo que está pasando entre ellos dos, una relación a escondidas, es amor o simple deseo.

Un pequeño relato de misterio e intriga para un corto paseo o digno de contribuir en una noche de insomnio en la madrugada.

La vida de Verónica "Ronnie" Miller se viene abajo cuando sus padres se divorcian y su padre se muda de New York a Wilmington, Carolina del Norte. Tres años después se va a pasar el verano con su padre, quien es pianista y profesor, y está llevando una vi

Todas hemos perdido algo reúne los libros de cuentos No me pases de largo (2013) y El libro perdido de Heinrich Böll (2008), así como la novela breve Residuos de espanto (2008). Las mujeres que los protagonizan son sobrevivientes, personajes que han tenido que afrontar el abandono, la condición que les fue impuesta, los sueños rotos y el pasado como una herencia que no se ha pedido, pero se lleva a cuestas. Con un estilo sórdido y como solo en la literatura es posible, la autora revela un descarnado retrato de la feminidad tocada por la soledad en sus diferentes aristas.

La Tierra se ha convertido en un planeta superpoblado, los productor químicos han envenenado el suelo y los mares y las desigualdades sociales han llegado a un límite que augura los peores pronósticos. Pero siempre hay un lugar para la esperanza, que en esta ocasión aparece bajo el ex convicto y ex viajero que capitanea un carguero nuclear, el "Estrella Trieste". Nadie como Aldiss es capaz de convinar la profundidad de las ideas con una novela de aventuras. Quizás el futuro de sus obras no esté tan lejano como pueda parecer.

La culpa era de mis amigas. ¿Cómo si no iba a estar pasando por ésto? Ellas habían sido las que me lo habían puesto delante, las que me hicieron mirarlo con otros ojos, las que me hicieron desearlo en silencio. La culpa tenía que ser de ellas… ¿Cómo podía ser de otra manera? ¿Acaso yo habría empezado a espiarlo si no llega a ser porque me hicieron verlo como lo veían ellas? Con lascivia… Odiaría por siempre a mis amigas, y los putos viernes. Los viernes siempre me traían a Víctor a casa, sin prisas, con sus amigos y sus bromas, con sus palabras obscenas y sus confesiones de ...