Los seres de carne putrefacta y una brea negra que sale de las heridas abiertas, los que ya no viven, pero tampoco están muertos, ésos a los que llaman los carcomidos, son los que están acabando con el pueblo entero. Allí viven Cristina, Esteban y Arturo, quienes sobrevivieron a esta epidemia después de que sus padres murieran, pues esta enfermedad, por alguna razón, no afecta a los niños ni a los adolescentes. Para colmo, un día desaparece Natalia, la hermana de Cristina, sin dejar rastro alguno. Con el tiempo, el aislamiento del pueblo, la comida que escasea y los ataques cada vez...