Trilobites

Como todas mis novelas, se trata de una historia de amor, mas esta, también, digamos de enredos y, espero, para mi satisfacción de escritora, que mis estimados lectores se sientan inmersos en la trama y no descubran la verdad hasta el final, aunque yo he dado muchas pistas para hacerlo más creíble. Solamente diré, por el momento, que la protagonista es una niña mimada, consentida, malcriada y caprichosa que tropieza con la horma de su zapato.

En 1973 el profesor Brajnovic publica sus Grandes figuras de la literatura universal y otros ensayos , un libro leído por decenas de promociones de universitarios. De esa obra magnífica se extraen ahora aquí tres de sus protagonistas: Homero, Dante y Shakespeare. Con la prosa del gran comunicador y la hondura del experto en literatura, Brajnovic introduce al lector en la biografía, contexto y aportación de cada uno de ellos: el mejor prólogo para enriquecerse luego con la lectura de alguna de sus grandes obras.

Una novela sobre el rey de los hunos por el autor de El muro de Adriano. Hacia el 449 d.C., Atila, el rey de los hunos, es el señor de la guerra más poderoso del mundo y se dispone a atacar Occidente. Los líderes romanos envían una embajada al campamento de Atila con la excusa de conseguir un acuerdo diplomático y sobornar a uno de los lugartenientes para que tome parte en una conspiración y asesinar a su líder. A esta misión se unirá Jonás. La conspiración es descubierta y Jonás es tomado como rehén. Consciente de que su vida corre un serio peligro, comprende que para sobrevivir ...

Antonio Ortuño es un gran prosista, atributo que, supongo, deberíamos esperar de cualquier escritor. Sin embargo, no pasa así. Es común que se publiquen libros apresurados, de prosa oscura o, peor, descuidada. Hay ejemplos famosos de libros premiados en concursos dotados generosamente que tienen una prosa plagada de palabras mal puestas. Son así por culpa de la patanería del autor, el corrector, el editor y también por la avaricia. Libros como salchichas de pavo. Los de Ortuño, al contrario, están cuidados con esmero detallista.