Cien Primaveras para Beatriz

Desde época helenística y durante toda la Antigüedad, el epigrama fue muy cultivado como género poético refinado y erudito. Pronto se hicieron antologías y recopilaciones de los poetas que lo utilizaron. Dos de las más importantes, la Guirnalda de Me

Qué es lejanías, más que una distancia larga, unos sueños dejándonos, una espera infinita; no hay compasión en lo lejano...sus palabras son oscuras, sus manos nunca complacen del todo, sus besos nunca alcanzan a ser tibios...siempre estamos partiendo, partimos de cada minuto que vivimos, de cada lugar que saludamos, de cada corazón que amamos y desamamos; duramos solo el lapso necesario...presentimos el tiempo y dejamos las puertas abiertas, desistimos del sueño por aquél que también dejaremos. Siempre hay un recuerdo, siempre una añoranza nos conmueve...De eso trata la vida, de...

Nosotros, «baby-boomers», de los '60 y los '70, fuimos el fruto acabado de una generación previa que le cantó a la democracia, la igualdad social y libertad individual, como ninguna otra en la vida estadounidense. Con rock, danza y bohemia al aire libre, abrazó al indígena nativo y disfrutó lo ecológico, con activismo estudiantil se dialogaron y activaron por causas comunes los universitarrios más brillante de las distintas etnias y, en conjunto, se dio solidaridad a movimientos libertadores y anticoloniales. Con melenas, barbas, trova musical y poesía que partió de la Generación...

Se presenta aquí una muestra de un poeta cuya obra goza del raro don de poder ser reconocible al primer golpe. Estamos ante un poeta moderno, en tanto actual y utópico, que se sostiene en ese no lugar del propio tiempo de escritura y, al mismo tiempo, posmoderno, en tanto fragmentario y desprovisto de una sola pertenencia textual. El lector descubre aquí una factura formal y desgarbada, un agente provocador y del acto solemne, tan fluido como el canto abrupto de la lírica de la trova provenzal.