Cazadores de Tesoros Perdidos: El Tesoro Rojo

Cuatro hombres uniformados están sentados alrededor de una mesa, conversan con la chimenea encendida y sus camisas a medio abotonar. La habitación está llena de tensión erótica. El adversario ha enviado a una mujer para espiar y descubrir sus secretos. Se dice que usa el arte de la seducción para conseguir lo que quiere. Estos cuatro soldados debaten con fascinación y lujuria, tratando de encontrar respuestas. ¿Quién es ella? ¿Cómo lo logra? Son muchas, y detalladas, las historias que circulan sobre la mujer y sus conquistas sexuales. Lo único que saben con seguridad es su nombre: ...

Otro día gris y lluvioso amanece para Diane Brooks. Aparentemente uno más en la vida de esta mujer soñadora y algo despistada, pero un encuentro fortuito en una reunión con un antiguo compañero de instituto vuelve a encender los dormidos deseos femeninos de Diane, haciéndole olvidar su recién estrenada soltería. Jacob se ha convertido en un apuesto y atractivo hombre que no duda en seducir a su antigua amiga desde el minuto uno. Diane pronto comprueba que su amigo especial de hace años ya nada tiene que ver con aquel adolescente tímido y algo antisocial. Ahora cualquier mujer...

Playboy multimillonario provoca un incidente internacional con su manifiesto sobre las mujeres... Jared Stone: visionario, rebelde, el chico de oro de la tecnología mundial... y también el hombre más odiado del planeta. Bailey St. John: superviviente, poderosa ejecutiva, la única mujer que se negaba a inclinarse ante Jared Stone... y también la única mujer que podía salvarlo. Cuando el manifiesto de Jared lo convirtió en el enemigo público número uno, la única salida fue ofrecerle a Bailey el puesto de directora de ventas, una oferta que no podía rechazar. Pero, con un gran...

Solo iba a tomar lo que le correspondía Reiko Kagawa estaba al corriente de la fama de playboy del marchante de arte Damion Fortier, que aparecía constantemente en las portadas de la prensa del corazón, y del que se decía que iba por Europa dejando a su paso un rastro de corazones rotos. Sabía que había dos cosas que Damion quería: lo primero, una pintura de incalculable valor, obra de su abuelo, y lo segundo, su cuerpo. Sin embargo, no tenía intención de entregarle ni lo uno, ni lo otro. Damion no estaba acostumbrado a que una mujer hermosa lo rechazase, pero no se rendía...