Arriano, conocido como Arrianos de Nicomedia o Arriano de Nicomedia, fue un historiador, escritor y filósofo griego, nacido alrededor del año 86 d.C. en Nicomedia, la actual İzmit, Turquía. Su vida abarcó gran parte de la era del Imperio Romano, un periodo de transformación cultural y política en el mundo mediterráneo. Arriano es mejor conocido por su obra sobre Alejandro Magno, título que refleja su profundo interés por la vida y las conquistas del célebre rey macedonio.
Hijo de un noble, Arriano recibió una educación esmerada, lo que le permitió adquirir conocimientos en diversas disciplinas, incluyendo filosofía, historia y retórica. Fue alumno del famoso filósofo estoico Epicteto, cuyas enseñanzas influyeron notablemente en su pensamiento y obras. De hecho, muchos de los escritos de Arriano reflejan esta influencia estoica, abogando por la virtud y el control emocional como elementos esenciales de una vida adecuada.
Uno de los trabajos más destacados de Arriano es Los Discursos de Epicteto, una colección de las enseñanzas orales de su maestro, que Arriano recopiló y publicó. Este texto es valioso no solo por su contenido filosófico, sino también por ser uno de los pocos registros que han llegado hasta nosotros de la filosofía estoica en su forma original. A través de sus escritos, Arriano logró dar voz a las enseñanzas de Epicteto, asegurando que perduraran a lo largo del tiempo.
Sin embargo, Arriano es quizás más conocido por su obra La Anábasis de Alejandro, que se traduce como "La marcha de Alejandro". Este relato histórico es considerado una de las biografías más completas y precisas de Alejandro Magno, proporcionando una visión detallada de sus campañas militares. Arriano utilizó, entre otras fuentes, las obras de historiadores anteriores como Cleitarcho y Heródoto, así como relatos de soldados que participaron en la corte del rey macedonio.
En La Anábasis de Alejandro, Arriano no solo narra las aventuras militares de Alejandro, sino que también ofrece un análisis de su carácter, destacando tanto sus virtudes como sus defectos. A lo largo de esta obra, Arriano deja claro que, si bien Alejandro era un líder carismático y un estratega brillante, también mostraba rasgos de temperamento y ambición que lo llevaban a tomar decisiones controvertidas.
La habilidad de Arriano para mezclar historia y filosofía se refleja en su prosa, que es a la vez clara y envolvente. Su estilo se caracteriza por una estructura bien organizada, donde cada capítulo está dedicado a una campaña o evento específico de la vida de Alejandro. Esto facilita la comprensión del lector, al tiempo que invita a la reflexión sobre las implicaciones de las decisiones de Alejandro y su legado.
Arriano también escribió otras obras, incluyendo Periplus del Mar Erytreo, un texto geográfico y comercial que describe las rutas marítimas en el océano Índico, así como las costumbres de los pueblos que habitaban en esas regiones. Aunque su obra sobre Alejandro ha eclipsado a sus otros escritos, el Periplus es igualmente importante para la comprensión de la geografía y el comercio en el mundo antiguo.
A lo largo de su vida, Arriano no solo se dedicó a la escritura, sino que también participó en la vida política de su época. Se sabe que fue un alto funcionario en la administración del emperador Trajano, lo que le permitió tener acceso a información privilegiada y a una amplia red de contactos que enriquecieron su obra.
La influencia de Arriano ha perdurado a través de los siglos, siendo un referente fundamental para historiadores y estudiosos de la filosofía. Su enfoque en la figura de Alejandro ha servido como base para numerosas obras posteriores, y su tratamiento de las enseñanzas de Epicteto continúa siendo estudiado en la actualidad.
Arriano falleció en algún momento después del año 180 d.C., dejando un legado importante en el ámbito de la historia y filosofía. Sus obras no solo brindan información valiosa sobre la antigüedad, sino que también invitan a la reflexión sobre el comportamiento humano, el liderazgo y la ética. En el panorama de la literatura clásica, Arriano se destaca como un autor que, a través de su pluma, ha contribuido a la comprensión de una de las figuras más emblemáticas de la historia, así como a la preservación de la filosofía estoica.