Cadáveres en la playa
Un Samuel Esparta ya maduro, que mantiene contra viento y marea su peculiar librería en Getxo, recibe en los años setenta la visita de una señora, Juana Ezquiaga, que quiere contratarlo para que averigüe la desaparición, mucho tiempo atrás, del que fue su amor de juventud. Juana sabe por un anciano pescador que las corrientes están llevándose la arena de la playa, y que pueden emerger los cadáveres que se esconden en sus tripas. En uno de los fusilamientos de la guerra civil, los falangistas abrieron una fosa común allí, y el pescador le ha contado que en el último momento...