Lo que se oye desde una silla de El Prado

Lo que se oye desde una silla de El Prado. Pedro Antonio de Alarcón Fragmento de la obra —¡Qué noche tan hermosa! —¡Hermosísima! —Y ¡qué calor ha hecho hoy!... Figúrese usted que esta mañana... —Agur... —Adiós... —Muy buenas noches... —Pues, sí, señor; como le iba diciendo a usted... —¡Ja! ¡Ja! ¡Ja! —¿Has conocido a ése? Es aquel que el año pasado... —¡Agua, aguardiente y azucarillos! ¡Agua! —¡Niñas! ¡Niñas! ¡Más despacio! —Tenga usted cuidado, Arturo; ¡que nos llama mamá! —¡Barquillero! —¡Matilde, eres un ángel!... ¡Eres una...