Como un volcán
Cass no podía seguir con una relación en la que sólo participaba su cuerpo y que le estaba rompiendo el corazón... Pero el trato que había hecho con el magnate siciliano Maximo Guiliano sólo incluía sexo, y cuando eso dejó de ser suficiente para Cass, Maximo decidió acabar con la relación. Y Cass se quedó destrozada... y embarazada.