Bienvenidos a Lúcido
¡Señoras, señores! ¡Calma, por favor! Entiendo vuestra confusión y vuestras dudas, entiendo que tengan miedo: todos lo tuvimos cuando despertamos en esta playa sin recordar nada. Me llamo Merodeador y conozco cada rincón de este lugar. Tras tantos años aquí, lo que aconsejo es que os quedéis en el pueblo de Kangei o que, como máximo, os dirijáis a los sitios más cercanos. Debo ser sincero para quien esté interesado en marcharse o en buscar una salida: muchas personas han muerto intentando volver por ese mismo mar que nos ha traído y yo, personalmente, he recorrido cada tramo y...